lunes, 25 de diciembre de 2023

SUEÑOS DE SEDA





Mirada prisionera
acaricia seda prohibida.

Ojos seducidos
son náufragos perdidos 
en velamen de refinado vestido
mordaz ríe por ser él
quien acaricia piel deseada.

Un brindis pronunciado
opaca pasión irrestricta.
Prohibida señal
mece viento con perfume de orquídeas 
vuelan sonrisas en compás indiscreto.

Profanos requiebros en sutil melodía
un encarnado palpitar refleja cenit extraviado.
Un suspiro demanda por un instante 
puede ser un último hoy.

Vorágine nocturna perdida en distinguido escote
es portal turgente de suaves colinas 
son llamaradas en volcánico abismo.

Un sorbo eterno 
grita la caricia consentida
vibran yemas en piel ajena 
incendio de quimeras pasiones.
Abrazo de suspiros reconocidos
acercamiento prohibido
juegan alas de mariposa en flama encendida.

Cristal de perlas 
muerde ilusión en copa risueña.
Rubí encendido 
perdido por no sentir.

¿Emoción pasada?

Entelequias consentidas
solo queda 
soberbio desliz en caricia de prohibida seda.

Yacerá en tu lecho mi peregrina ilusión
no podrás detenerme.
Capricho consentido es brevedad de contenida exhalación
es más verdad 
que lo negado.
No serás mía
en un tuyo perdido
queda un huérfano cielo
no hay más.




 

lunes, 18 de diciembre de 2023

VIAJERO SILENTE - PARTE II

 ********** EL VIAJERO SILENTE - PARTE II - LIVERPOOL  ******

Es verano del 65 y el calor de esa tarde nos baña sin pausa con un sol que ha tomado posesión del valle Tambo, Cocachacra está que arde. Sumergidos en la acequia turbia junto a mis amiguitos damos incansables zambullidas, formamos dispersas a ondas con cada brazada, junto a otras que llegan de un radio de onda corta es "I should have known better" de los Beatles (en esa época no sabía que significaba, la canción qu

e me ha enseñado mi amiguito Juan Carlos). Ahora, en el futuro del pasado de mi infancia o ¿en el pasado de mi futuro? Estoy en un viaje inmersivo, hemos llegado a Liverpool, el nombre me parece esos enormes titulares que salen en la pantalla del cine y me llenan toda mi visión mental. El viaje en tren desde Londres ha sido limpio, aséptico, tan veloz que ni se siente (250 km/h) hubo buen tino en escoger al hotel Astors en la zona de Belgravia, está cerca de una de las estaciones del metro y del tren (Estación Victoria, caminando uno llega al Palacio Buckingham), cruzamos grandes campos verdes, todo ordenado. Liverpool es una ciudad que tiene otro "swing" el andar de la gente tiene otro pulso y sus conversaciones son más alegres, animadas y dinámicas. Claro, como ahora voy en silencio escucho mejor; más aún, con la recomendación que nos hizo Morgana cuando, apenas, teníamos algunas horas en Londres, se dio cuenta de que todos hablan en inglés al escucharnos conversar levantó su manito pidiendo atención.
-¡Stop!
-No, Spanish.
Alguna vez (bueno, varias), me dijeron que no sea tan callejero ya que siempre buscaba una excusa para salir a la calle; esta vez, sonrío al recordar ese episodio y voy callejeando las calles de Liverpool que tienen un compás musical que driblea el tiempo y el fútbol (Liverpool FC, Everton) que es parte de su esencia. Sopeso las posibilidades de que alguno de los Beatles haya estado caminando por estas mismas calles y pienso que sí (al final, uno cree lo que quiere). Hemos llegado al lugar donde vamos a iniciar el tour en uno de esos buses de dos pisos que están estacionados en Strand St en un lado del malecón del río Darsey. Aquí, las emociones se juntan y llenan los asientos del bus que va a hacer un circuito de unas dos horas. Pasamos cerca del Hilton hotel, el St. George Hall es imponente, se usa como salas de teatro, reuniones y dependencias jurídicas. La Liverpool Philarmonic sede de la orquesta Filarmónica del Reino Unido, la Catedral de Liverpool; todos con singulares atractivos. De pronto llegamos a una rotonda y el guía nos señala una barbería “Tony Slavin” en la calle Smithdown nos dice con voz profunda:
―Aquí, se cortaban el cabello los Beatles cuando eran jóvenes. ―Todos miraron con más atención y muchos recordamos nuestros propios cortes de cabello en el peluquero del barrio. El guía es muy ameno y nos dice que estamos por llegar a la calle Penny Lane y que podremos bajar para tomarnos una foto. Descendemos con los corazones acompasados, esperamos nuestro turno para tomar las vistas históricas para la familia y comenzamos a retornar, en eso, la vocecita de Morgana.
―¿Hemos bajado, solo, para eso? ―Bueno, aún, debo seguir explicándole algunas cosas sobra la banda sonora de la vida de su “abu”.
Llegamos a Strawwberry Field y hay rejas que cuentan muchas historias. En el camino nos permiten tomar fotos de las casas de John, Paul y Ringo. Las casas se conservan, tal cual, desde décadas atrás; esto, porque, la arquitectura es muy similar y tienen un periódico y obligado mantenimiento que deben hacer los propietarios. Estando por concluir el tour, el guía se pone a cantar dos melodías de los Beatles con su ukelele nos llena de nostalgia y hace que su voz, cada vez, se parezca a ellos.
Terminada la travesía, a almorzar y de allí, al barrio de Cavern Quartier para llegar a Mathew St N°10 donde está the Cavern Club. Después, de pagar las entradas fuimos bajando las obscuras escaleras. Antes, esto fue una bodega, luego, su propietario lo convirtió en una taberna para imitar los bares subterráneos con música jazz franceses. Con varios arcos, techos bajos, todos de ladrillo fuimos siendo captados por el magnetismo Beatle. The Cavern es la versión reconstruida con parte de los miles de ladrillos de la original que fue derruida, se ubica en el mismo lugar (ocupa el 70%) que la primera y se ha respetado, escrupulosamente, la misma distribución. Aquí, tocaron antes de su destrucción bandas como Rolling Stone, Queen, Elton John, the Who, etc. Después, de su reconstrucción han hecho su intervención importante músicos de categoría mundial. Terminamos de bajar las escaleras y parece que estuviéramos en una especie de catacumbas, pero, aquí, hay mucha vibración musical y alegría en la gran cantidad de personas que están sentados en mesas tomando sus cervezas, fotos en los murales y en cada rincón de la caverna. En ese momento en el estrado está Craig L W, un joven desgarbado, alto, con el pelo sobre la frente y cuando comienza a cantar hace que imaginemos a un John en sus inicios, realmente, estás inmerso en la música. Miro a Nelia, a mis hijas y a Morgana y creo que por un momento están capturadas por los acordes que rebotan simétricamente entres estos arcos y paredes; finalmente, crees lo que quieres ver. El lugar es como para quedarse, pero, aún, nos falta seguir callejeando hacia las estatuas; salimos del barrio Cavern Quartier y entre grandes edificios neoclásicos llegamos al malecón para ver sonreír a cuatro jóvenes que siguen haciendo historia.
Pronto saldrá “Now and then” una canción inconclusa de John (década de los 70´) después, de la muerte de Lennon fue desarrollado por Paul, George y Ringo. La voz de John Lennon fue extraída de la maqueta original con IA. Esta sería la última creación de the Beatles.
La hora avanza y ya debemos retornar al terminal ferroviario para retornar a Londres. Ya no se escucha el característico traqueteo de los ferrocarriles de hace décadas, pero, el tenue zumbido de este tren eléctrico parece el remanso de una arcana acequia que sigue llevando las ondas de la música de mi infancia.

VIAJERO SILENTE  -  PARTE 4 VENECIA Una hora y treinta minutos y ya estamos aterrizando en Venecia. La he visto, tantas veces, en pelí...