lunes, 19 de mayo de 2025

EL OLVIDO Y LA MEMORIA, CUANDO PREOCUPARSE

El olvido y la memoria, cuando preocuparse

Olvidar es normal, pero cuando los olvidos afectan la rutina diaria, pueden ser una señal de alerta. Olvidar dónde dejamos las llaves o una palabra ocasional es parte de la vida. Sin embargo, cuando los olvidos comienzan a interferir con nuestra rutina—como no pagar facturas, perderse en lugares conocidos o repetir constantemente las mismas preguntas—podrían ser indicios de algo más serio, como el Alzheimer u otra forma de demencia.

Factores que afectan la memoria

El estrés y la ansiedad son enemigos silenciosos de la concentración y la memorización. Dormir menos de ocho horas, afecta la capacidad del cerebro para consolidar recuerdos. Una dieta inflamatoria, cargada de comida chatarra y preservantes, dañan la función cerebral. Además, antes de pensar en demencia, es crucial descartar la depresión como causa de los olvidos.

Consejos para mejorar la memoria

Para mantener una buena memoria, es fundamental organizarse, estimular la mente con actividades como juegos y variar rutinas. Llevar una vida activa, socializando y haciendo ejercicio, adoptar hábitos saludables como una dieta equilibrada, dormir ocho horas y reducir el estrés.

¿Cuándo consultar al médico?

Si los olvidos son frecuentes y comienzan a afectar significativamente la vida diaria, es importante buscar ayuda profesional. La demencia no solo afecta la memoria, sino también habilidades como el lenguaje, la orientación y la capacidad para resolver problemas.

Conclusión
Los olvidos son parte natural de la vida, pero no debemos subestimarlos, especialmente si afectan nuestro día a día. Cuidar la memoria es esencial, no solo nos conecta con el pasado, sino que nos guía hacia el futuro. Adopta hábitos saludables y mantén la mente activa. La memoria es un puente entre tu pasado, presente y futuro.

¡Cuida tu cerebro, cuida tu vida!

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